Los productores del Óscar buscaban elevar los niveles de sintonía en los 200 países donde la ceremonia será sintonisada, y para ello intentaron reunir, sin suerte, a la autoras de Harry Potter y Crepúsculo.
De acuerdo a una publicación de Los Angeles Times, las escritoras J.K. Rowling, autora de Harry Potter, y Stephenie Meyer, creadora de la saga Crepúsculo, fueron invitadas a presentar juntas el Óscar al mejor guión adaptado. Sin embargo, ambas rechazaron la oferta.
Ambas tuvieron sus razones para rehusarse. Rowling dijo que las ya tenía otros compromisos para ese día, mientras que Meyer, que es miembro de la iglesia mormona, tiene prohibido trabajar los domingos.