Daniel Radcliffe despierta a una nueva vida

Hoy, sábado, el actor cumple 23 años. Tras el final de ‘Harry Potter’, él explora nuevos caminos actorales, mientras deja atrás algunos excesos

Ahora, un nuevo horizonte se le dibuja al actor británico, quien, por cierto, hoy está cumpliendo 22 años. A esta edad, ha comenzado a tomar mayor conciencia de su futuro artístico, al tiempo que aprende a manejar su vida personal, lejos de las fiestas y el alcohol.

Ya sea en los teatros de Broadway o en los estudios de Hollywood, Daniel Radcliffe está seguro de que seguirá casado con la actuación.

Para él, el libro no se cierra y está convencido de que “hay vida después de Harry Potter”, tal y como dijo en una entrevista con el diario español La Voz de Galicia.

“Yo quiero ser actor y tener una larga carrera, solo espero que a partir de ahora me ofrezcan personajes que no tengan mucho que ver con Potter, para poder mostrar mi capacidad como intérprete”, ha dicho el británico.

A su corta edad, a Radcliffe no le ha ido nada mal. No solo porque es el adolescente más rico de Gran Bretaña, con una cuenta bancaria de $5.400 millones, sino porque además ha tenido la oportunidad de explorar otros personajes, más allá del joven mago.

Por la época en que filmaba La Orden del Fénix (2007) se le presentó la oportunidad de protagonizar el filme December Boys (Un verano para toda la vida). Además, recientemente, terminó de rodar en The Woman in Black.

Esos papeles han sido importantes para la filmografía del británico, si se toma en cuenta que entre sus planes no está vivir etiquetado toda la vida bajo el nombre de Harry Potter, aunque es consiente de que nunca se deshará de ese personaje, según dijo en entrevistas con los diarios La Voz de Galicia y LaVanguardia, de México.

“Harry Potter ha sido mi gran oportunidad como actor y estoy muy agradecido por ello. Por supuesto, el personaje va a estar asociado a mí toda mi vida, y no sería quien soy sin haberlo interpretado. Jamás voy a mostrar ingratitud”, dijo el actor a La Voz de Galicia.

¿Niño bueno? Una de las más grandes pruebas de que el joven ha intentado desembarazarse del uniforme y de los lentes del mago, fue en el 2007, durante su participación teatral en Equus.

Esa actuación es, quizá, una de las más memorables de Daniel Radcliffe, lejos de la magia de Harry Potter. No solo porque interpretó a un joven perturbado –papel totalmente opuesto al de Harry– sino porque además el británico apareció totalmente desnudo en el escenario, hecho que escandalizó a la conservadora sociedad inglesa.

De ahí en adelante, la idea de aparecer de cuando en cuando en las tablas quedó picando entre los planes del actor, quien se volvió a subir este año a los escenarios de Broadway, para aparecer en el musical How to Succeed in Business Without Really Trying.

Las críticas del papel suyo en el musical han sido benevolentes, pero no magnánimas, si se comparan con las que ha recibido por sus actuaciones en Harry Potter.

Por ejemplo, el diario estadounidense The Washington Post había dicho que, si bien Radcliffe se había mostrado “encantador y esmerado”, el musical “era demasiado para él”. Mientras que la revista The Hollywood Reporter fue más condescendiente al decir: “(Si bien) no destella como un artista de teatro musical, la estrella de Harry Potter hace un buen trabajo de canto y baile en la reposición”.

El peso de las críticas y el de reinventarse quizá sea uno de los más grandes retos que deberá afrontar de ahora en adelante el célebre joven, a lo largo de su carrera.

Como se ha visto, interpretar a un gran personaje en el cine suele ser, para los actores, un arma de doble filo. Tras consagrarse con un gran papel, lograr destacar con otras interpretaciones puede convertirse en una lucha perdida.

Pocos artistas, que son recordados por un personaje específico, han logrado destacar con otras actuaciones. Por mencionar algunos, Arnold Schwarzenegger (Terminator) Marlon Brandon (El Padrino) o Charlton Heston (Ben-Hur).

Cambios. En medio de sus retos profesionales, Radcliffe atraviesa por nuevas etapas en su vida personal.

“Ahora me siento más adulto que cuando cumplí 18 años, porque sé que no voy a tener que volver a ponerme el uniforme del colegio (en Harry Potter). Cuando veo fotos mías a los 11 o 12 años me entristezco porque me hubiera gustado tener esa edad para siempre. Aunque mis palabras me hagan parecer Michael Jackson, reconozco que echo de menos mi infancia”, comentó el británico a La Voz de Galicia.

También ha aprendido a superar otros obstáculos. Recientemente, sorprendió con una entrevista que ofreció a la revista masculina GQ, en la que admitió que desarrolló una adicción al alcohol.

“Me volví adicto al alcohol para disfrutar de la vida. Hubo varios años en los que estaba totalmente enamorado con la idea de vivir una vida de famoso, que realmente no es lo mío”, dijo el actor, al tiempo que aseguró que cuando se dio cuenta de su adicción decidió cuidarse y dejar de tomar.

Ahora no asiste a fiestas escandalosas y lleva una vida tranquila, con su novia Olivia Uniacke, pese a que se sabe famoso, no por ser Daniel Radcliffe, sino por ser Harry Potter, y así lo dijo a La Vanguardia: “La fama de Potter es realmente increíble. Eso es lo que nunca olvido, la gente no grita en los estrenos por mí. Cualquiera que hubiese tenido el mismo personaje hubiera vivido la misma locura”.